Luego de que hace ya algunas semanas trascendiera en redes la selfie de un oso y una chica en un parque ecológico en Nuevo León, Griselda Garza, encargada del despacho de la Profepa, dio a conocer que el osito fue castrado y enviado a la sierra de Chihuahua.
En entrevista con medios locales, Griselda Garza explicó que la decisión de liberarlo en la sierra de Chihuahua, se debe a lo peligroso que resulta su acercamiento a zonas habitadas.
Detalló que el ejemplar macho fue castrado para evitar su reproducción y la «contaminación genética», de la especie que existe en Chihuahua.
Además esclareció que la decisión fue tomada desde las oficinas de las centrales de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), en la Ciudad de México.
«Debido a que en la Sierra de Chihuahua hay otra especie de oso negro, se debe evitar contaminación genética, o sea, la cruza de especies diferentes, mezclas genéticas, evitando así el desplazamiento en búsqueda de hembras» – Griselda Garza, encargada del despacho de la Profepa en Nuevo León
Agregó que, por otro lado, al oso número 34 del Parque Chipinique se le colocó un collar de telemetría para poder monitorear sus movimientos.
INFORMACIÓN: Milenio
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