México rebasó este fin de semana ya las 35 mil defunciones por Covid-19, con lo que nuestro país se ha colocado en el cuarto lugar mundial con más fallecimientos por esta causa.
La enfermedad ya se ubica entre las cinco principales causas de muerte, alertó Gustavo Olaiz, coordinador del Centro de Investigación en Políticas, Población y Salud de la UNAM, pues representa cerca del 5 por ciento del total de fallecimientos que se registran anualmente
Olaiz indicó que cada año en México se reportan alrededor de 730 mil muertes, sin embargo, el número de fallecimientos por Covid-19 se ha registrado en menos de un semestre, es decir, de marzo a julio.
Esto significa, precisó Olaiz, que Covid-19 se ubica entre las cinco causas principales de mortalidad en México.
“Pensar que ya una enfermedad nueva esté entre las principales causas de muerte en cuatro meses es complicado. Se decía: ‘No se nos han apilado los muertos’, pues claro que sí, ya va en el 5 por ciento de la mortalidad, es muchísimo.
Hacía mucho que en México no había una enfermedad infecciosa que tuviera ese nivel, esa connotación”, alertó.
El investigador de la UNAM resaltó además que la pandemia está en sus fases iniciales todavía.
Señaló la importancia de vivir y convivir con el virus a partir de abandonar costumbres y hábitos muy arraigados a nosotros, como escupir en la calle, reuniones familiares, ser gritones y poco disciplinados; y hasta morir en casa, que de acuerdo con el especialista, se ha convertido en una costumbre de los mexicanos y ya no podemos hacerlo, pues el COVID-19 es altamente contagioso.
Por su parte, el infectólogo Alejandro Macías, quien en 2009 fue comisionado nacional para la prevención y control de la influenza, advirtió que la epidemia está todavía entrando con fuerza en prácticamente todo el territorio nacional, aunque hay dos o tres sitios donde ya pudo haberse estabilizado.
Dijo que es evidente que la estrategia contra Covid-19 no ha sido lo eficaz que se quisiera, por lo que se debe apelar a la aplicación de medidas basadas en evidencia, como la promoción clara, franca y sin ambigüedades del uso de cubrebocas y mascarillas en lugares cerrados.
INFORMACIÓN: El Heraldo
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