México logró uno de los cinco lugares para el periodo 2021-2022 del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas tras la votación del día de hoy y en la que contó con el apoyo unánime del bloque de América Latina y el Caribe.
Debido a la emergencia sanitaria por Covid-19, la votación se llevó a cabo de manera aislada, uno a uno, por los representantes de las 192 naciones agrupadas en la ONU y no en Asamblea General.
En esta elección que se desarrolló en la sede de este organismo en Nueva York, se prolongó durante casi 5 horas debido a las restricciones de sana distancia; los 193 embajadores votaron para nombrar al nuevo presidente de la Asamblea General, a 5 de los 10 miembros rotativos del Consejo de Seguridad y a 18 de los 54 miembros del Consejo Económico y Social. Con México buscando un lugar en estos dos últimos.
México fue candidato único del Grupo de Latinoamérica y el Caribe como lo fue India del Grupo Asia y el Pacífico, asegurando los dos primeros asientos.
El Consejo de Seguridad es conformado por Estados Unidos, China, Rusia, Reino Unido y Francia, que ostentan los 5 asientos permanentes.
Además de Estonia, Vietnam, Túnez, Níger y San Vicente y las Granadinas, cuyos relevos serán votados el 2021.
Mientras que México ocupará, por quinta vez en la historia, el lugar de República Dominicana. Delegación que, como las de Alemania, Bélgica, Indonesia y Sudáfrica, concluyen su bienio este año.
Además de este asiento, México también logró ser reelegido como uno de los 10 representantes de América Latina y el Caribe en el Consejo Económico y Social.
El representante permanente de México en Naciones Unidas es Juan Ramón de la Fuente, quien emitió sus votos en cada una de las tres urnas instaladas en el salón de plenos.
Funciones y poderes del Consejo de Seguridad
En la Carta de las Naciones Unidas se estipula que las funciones y poderes del Consejo de Seguridad son, entre otras, mantener la paz y la seguridad internacionales de conformidad con los propósitos y principios de la ONU; investigar toda controversia o situación que pueda crear fricción internacional y recomendar métodos de ajuste de tales controversias, o condiciones de arreglo;
De igual forma, elaborar planes para el establecimiento de un sistema que reglamente los armamentos; determinar si existe una amenaza a la paz o un acto de agresión y recomendar qué medidas se deben adoptar, así como instar a los Miembros a que apliquen sanciones económicas y otras medidas que no entrañan el uso de la fuerza, con el fin de impedir o detener la agresión.
INFORMACIÓN: – Excelsior –