Los niños son científicos natos, hacen preguntas importantes que incluso nosotros no sabemos, es por eso que no existen las preguntas estúpidas.
“Se les ocurren preguntas provocadoras y perspicaces. Muestran un entusiasmo enorme. Me hacen preguntas sobre detalles. No han oído hablar nunca de la idea de una “pregunta estúpida». Carls S
Carl Sagan, astrónomo, astrofísico, y entre muchas otras cosas escritor, mencionó que los niños no hacen preguntas estúpidas, que muchos de ellos son científicos natos, son curiosos y tienen vigor intelectual.
Sobre el tema, dijo que los niños no saben lo suficiente como para dejar de hacer preguntas importantes, y que incluso muchos de nosotros no sabemos el por qué de las cosas, de la naturaleza, de los cosmos, es decir, ¿siempre han estado ahí?
“Incluso hay niños, y he conocido algunos, que quieren saber cómo es un agujero negro, cuál es el pedazo más pequeño de materia, por qué recordamos el pasado y no el futuro, y por qué existe un universo”
Lo más alarmante es que los adultos se enfaden por estas preguntas, sobre todo por las preguntas científicas: ¿por qué la naranja es redonda?, preguntan los niños, ¿por qué la hierba es verde?, ¿qué es un sueño?, ¿hasta qué profundidad se puede cavar un agujero?, ¿cuándo es el cumpleaños del mundo?, ¿por qué tenemos dedos en los pies?
Carl Sagan añadió, no entender por qué los adultos simulan saber todo ante niños de seis años. “¿Qué tiene de malo admitir que no sabemos algo?”. De acuerdo con él, hay mejores respuestas que decirle a un niño, además, si se tiene la respuesta se puede intentar explicar aunque el intento sea incompleto.
Hay que recordar, que los niños listos que tienen curiosidad son un recurso nacional mundial, que se les debe cuidar, pero no basta con el mero ánimo, también se les debe dar las herramientas esenciales para pensar.
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