Entendido que el manejo del dinero en pareja no se da de manera automática, la Profeco extiende claves y recomendaciones para llevar una mejor relación entre la vida de pareja y las finanzas.
Una vida en pareja, no sólo concierne a la parte sentimental, también en el muy poco romántico aspecto de las finanzas. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) brinda algunas claves y recomendaciones para llevar una mejor relación entre la vida de pareja y las finanzas.
Profeco, dice que las finanzas multiplicadas por dos pueden poner en riesgo el éxito de la relación y que ciertos hábitos destructivos suceden cuando no planifican a dónde quieren que vaya su dinero o no evalúan las consecuencias de sus decisiones:
Pagar el mínimo en la tarjeta de crédito,
gastar todo el ingreso,
no pagar servicios básicos,
pagar las cuentas fuera de tiempo, y
no tener un fondo de emergencia o no ahorrar para la jubilación.
Aunado a esto, según datos del Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2020 se observó una disminución de la población de 12 años y más que tenían una relación de pareja (53.8%) a comparación del año 2010 (54.9%).
No obstante, en los últimos años los matrimonios han disminuido, mientras que los divorcios aumentaron en 2020 presumiblemente a consecuencia de la pandemia según datos de Estadísticas de Nupcialidad de INEGI.
La planeación en pareja.
Los principales gastos en pareja, están relacionados a la compra de alimentos, transporte y vivienda. La Procuraduría dice que para que los problemas no entren por la puerta, es esencial determinar los gastos más importantes, tener en cuenta los ingresos individuales y saber cuántos gastos personales asume cada quién.
La planificación financiera a través de un presupuesto ayudará a determinar ingresos y gastos y ajustarlos de acuerdo a circunstancias y prioridades:
Reúnan los recibos, estados de cuenta, tickets de compra e información que van a utilizar al momento de llenar su presupuesto.
Determinen los gastos periódicos y esporádicos de forma mensual.
Trabajen bajo el modelo de lo tuyo, lo mío y lo nuestro, estructura que permite una mejor distribución. La importancia de este modelo reside en que cada miembro mantenga independencia económica, sin dejar de lado la responsabilidad de los gastos comunes, logrando así mantener ciertos gustos individuales y dando lugar a los detalles en pareja sin que éstos repercutan en el gasto familiar.
Una vez identificados los ingresos de cada miembro del hogar es importante determinar quién asumirá el pago de cada bien o servicio o bien, distribuirlos equitativamente. Por otro lado, destinar parte de los ingresos de la pareja al ahorro para planes o inversiones a futuro también es esencial.
Finalmente la Profeco indica, que la realidad es que no existe un método ideal para distribuir los gastos en pareja, pero que es importante darse cuenta de que hay opciones y pueden personalizarlas de acuerdo a su situación y necesidades en conjunto.
El trabajo en equipo, la comunicación y una buena planeación son la clave para lograr el equilibrio financiero en pareja.
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